Friday, February 26, 2010

Memoria de elefante...


Santiago Roncaglolio, autor de "Memorias de una dama" debe estar feliz con el éxito de este libro, y es que no a todos los libros se les compran los derechos para evitar ser difundido en una isla, y no cualquier isla. Dicen las buenas lenguas que la edición completa fue comprada por "gente influyente". Wao, qué lujo! El problema es que uno no sabe si en el país de las maravillas, donde viven Alicia, Figueroa Agosto, Sobeida y aquel escabullidizo conejo; las noticias son un spam publicitario o un complot misterioso donde lo que se esconde es dos veces peor de lo que se dice. ¿Qué tan revelador puede ser el argumento de este libro como para querer impedir su circulación?. Que se hable de fascismo, de la CIA o de la mafia italiana ya no sorprende a nadie, a menos que el sombrero sea tan grande que le sirva a todo un grupo que recurre al extremo de atentar contra la libertad de expresión. A todo ésto la editora Alfaguara se ha quedado muda. ¿Y los lectores qué? Nos queda obtenerlos con algún familiar que viaje, o comparlos por internet. Lógica elemental.

DESAHOGO


martes 16 de febrero de 2010

Es oficial: Mi incapacidad para la "diplomacia" fingida y oportuna es lo que no ha permitido conquistar mayores "logros" en todos los ambitos. Cuanto daría por ser capaz de abandonarme a la manipulación y al descaro. Lo intento pero no lo logro, mientras observo como los otr@s, l@s de antes consiguen "dádivas" al costo de su integridad. Ya quisiera conquistar el mundo de la apariencias, olvidarme del anhelo de ser realmente independiente y libre -al menos de pensamiento- el punto es que no he podido controlar la palabra, la obra y aunque quiera no me uno al club de la omisión...

A propósito del libro “Trujillo, mi padre”...

Escrito por: Koldo (el.nacional@codetel.net.do)

El llamado “Vampiro de Dusserforl”, cuando encontraba algún rato de asueto y se desentendía de sus habituales crímenes, prodigaba caricias y ternuras a su numerosa familia.

El “Estrangulador de Boston” era un hombre afable, encantador, que una vez terminaba su jornada estrangulando vecinos por los alrededores de su ciudad, corría a arrullar el sueño de sus dulces hijas.

La única foto que se conserva de “El Carnicero de Milwaukee” nos lo muestra sonriendo durante una Nochebuena, rodeado de sus hijos y nietos en enternecedora y cristiana estampa.

Jack el Destripador, siempre que degollaba a alguna mujer en Navidad, tenía por costumbre tararearle un villancico mientras le hundía la hoja en la garganta.

“El asesino de la Cruz Roja”, célebre por haber dado muerte en Estados Unidos a no pocos adolescentes, incluía en su álbum familiar fotos de sus víctimas y hasta les celebraba sus cumpleaños.

El ganster Frank Nitti, conocido como “El Ejecutor” y principal matarife de la mafia de Chicago, una vez terminaba su trabajo, regresaba a su casa cargado de regalos para sus hijos y flores para su esposa.

Al Capone era tan considerado y respetuoso con la institución familiar que cada vez que asesinaba a un padre de familia, en el momento de apretar el gatillo cerraba los ojos para no verlo.

Y sí, Rafael Leónidas Trujillo era muy cariñoso con su familia. De hecho, nada le complacía tanto como que su amorosa hija menor adornara con flores la solapa de su chaqueta… pero los dominicanos, los haitianos, la humanidad, no lo recuerdan por esos tiernos y cálidos detalles.

Es por ello que el mismo derecho que tiene la hija en recordar al padre, lo tiene el país en no olvidar al sátrapa. Y en consecuencia, a desalojarlo para siempre de la vida pública dominicana, y no sólo de un hotel por motivo de la exhibición de un infame libro; también de las conductas, de los criterios, de las maneras e instituciones en la que sigue vigente, cincuenta años más tarde, su repugnante y criminal legado, incluyendo el Palacio Nacional.

Tuesday, February 16, 2010

Mandela, 20 años en libertad...

Eduardo Anguita
Prodiario

El 11 de febrero Nelson Rolihlahla Mandela cumplió 20 años de regreso a la libertad. Tenía por entonces 72 años y desde los 45 había vivido en la cárcel. Su esposa de entonces, Winnie, que había soportado durante años las humillaciones y las persecuciones, fue a esperarlo esa mañana a la prisión Victor Verster, en Ciudad El Cabo. Allí había estado Mandela los últimos 11 años de su vida. Antes había pasado 16 largos inviernos confinado en Robben Island.

Ese 11 de febrero de 1990 salía en libertad el preso político más sufrido y más solidario de la historia de las luchas populares del siglo XX. El que había pasado aislamiento y vejaciones, el que había rechazado sin la más mínima duda el ofrecimiento del régimen blanco de salir en libertad a cambio de legitimar el racismo. La oferta había sido en 1980 y consistía en que Mandela aceptara mudarse a uno de los bantustanes, como llamaban a territorios donde los pobladores vivían sometidos al racismo con cierta resignación. Mandela hizo público el ofrecimiento y su rechazo. Eran tiempos de lucha clandestina y de crímenes inhumanos. La fe del líder, su sacrificio personal, fue oxígeno para miles y miles de militantes del Congreso Nacional Africano.

Esa mañana Winnie lo esperaba en la puerta del penal. Mandela, vestido con saco y corbata, salió y sonrió con la misma naturalidad con la que pasó en las sombras la friolera de 9.855 días. En el momento en que los fotógrafos quisieron disparar las cámaras, Mandela desplegó una sonrisa plácida, la del hombre que estaba en paz consigo mismo y con las privaciones que había sufrido. Pero, además, para que no quedaran dudas, con una mano tomó a Winnie y levantó la otra, apretó su puño con fuerza y decisión, confirmando que estaban frente al líder de la nueva Sudáfrica. Mandela desafiaba al régimen que empezaba a dar los primeros síntomas de agotamiento.

El apartheid se había establecido en 1948, apenas tres años después de los juicios de Nuremberg, cuando la humanidad quedaba estupefacta por los crímenes del nazismo, basados en la idea de una raza superior. El apartheid llevaba medio siglo de existencia, había empezado prohibiendo los matrimonios interraciales y, en una escalada demoníaca, terminó estableciendo un régimen esclavista. El contraste de la Sudáfrica de esos años era pornográfico: las empresas mineras de oro y diamantes más ricas del planeta en manos de algunas familias boers y millones de xhosas, zulúes y de otras nacionalidades sin ninguna clase de derechos. El ejemplo más dramático lo daba Soweto, una gran villa miseria de un millón de habitantes, rodeada por muros y alambres de púas, adonde sus pobladores no podían regresar después de las seis de la tarde a riesgo de ser encarcelados o ejecutados sumariamente. Soweto cobró notoriedad en 1976 cuando unos chicos que cursaban el secundario protestaron porque les impartían la educación en idioma afrikaans, la lengua del opresor, mientras que no podían siquiera hablar en swahili en las clases. Mandela, que estaba encarcelado por entonces, tenía su casa en Soweto y muchas de las placas que recuerdan a las víctimas de esas luchas (chicos de entre 13 y 18 años) fueron colocadas frente al domicilio del revolucionario preso.

Nacido un 18 de julio

Miles y miles de luchadores de todo el mundo, durante los revolucionarios años sesenta y setenta pasaron larguísimas temporadas en la cárcel y fortalecían su espíritu con el ejemplo de ese luchador altivo y humilde confinado en una isla. Mandela y otros militantes del Congreso Nacional Africano fueron logrando mejorar sus condiciones de encarcelamiento y llamaron “la Universidad” a esa espantosa prisión. Durante los recreos y horarios que podían compartir organizaban cursos, intercambiaban conocimientos y, por sobre todas las cosas, se preparaban para volver a la lucha. Mandela era abogado y transmitió a sus compañeros algunos de los conocimientos que había adquirido durante su formación académica. Curiosamente, le había ganado por unos años al régimen del apartheid, ya que ese sistema empezó en 1948, y él había logrado su título un tiempo antes.

Mientras el régimen racista lanzaba, una a una, las disposiciones racistas, en 1955 el Congreso Nacional Africano lanzó una campaña para el establecimiento de un Estado multirracial, igualitario y democrático, una reforma agraria y una política de justicia social en el reparto de la riqueza. La réplica fue la creación de los bantustanes, para confinar sobre todo a los luchadores. Mandela, junto con otros dirigentes, convocó a la resistencia civil. El régimen blanco quiso escarmentar y en Sharpeville la policía masacró a la multitud desarmada, matando a 69 manifestantes. De inmediato la persecución se extendió a todo el país y Mandela fue detenido, durante unos meses, en 1961.

Al ser liberado, en vez de achicarse, redobló la apuesta: ante el estado de sitio y la represión abierta, el incipiente líder revolucionario se puso al frente de una nueva organización clandestina, que se constituía en el brazo armado del Congreso Nacional Africano. Así surgió la Lanza de la Nación, que comenzó con acciones de sabotaje y ataques con células rudimentarias de lucha armada. Tras viajar por varios países africanos y establecer alianzas con otros movimientos revolucionarios, de regreso al país Mandela fue detectado y capturado. En esos tres años se había constituido en el referente de la confrontación abierta de un gobierno tan criminal como poderoso. Por supuesto regía la pena de muerte y cuando fue llevado a juicio sabía que podían ahorcarlo al fin de sus declaraciones frente al tribunal. Mandela, abogado como Fidel Castro, que había sido juzgado diez años atrás por una causa similar, al igual que el líder cubano asumió su propia defensa. Algunas de sus altivas afirmaciones fueron música para los oídos de los militantes que seguían luchando en la clandestinidad. “Señoría, detesto intensamente la discriminación racial y todas sus manifestaciones. La he combatido durante toda mi vida. Ahora mismo la estoy combatiendo y continuaré haciéndolo hasta el final de mis días.”

Invicto

Mandela es hijo de un líder tribal de la comunidad xhosa, la mayoritaria en Sudáfrica. En 1994, apenas cuatro años después de salir en libertad, ganaba la presidencia por una mayoría abrumadora. No sólo lo votaron los xhosas, sino los zulúes, la extensa comunidad hindú y también muchísimos blancos. Ese mismo año publicó su autobiografía, Un largo camino a la libertad, que comienza con bellas palabras: “No nací con hambre de libertad, nací libre en todos los aspectos que me era dado conocer. Libre para correr por los campos cerca de la choza de mi madre, libre para nadar en el arroyo transparente que atravesaba mi aldea (...) Sólo cuando empecé a comprender que mi libertad infantil era una ilusión, cuando descubrí, siendo joven, que mi libertad ya me había sido arrebatada, fue cuando empecé a añorarla”.

Mandela se encontraba con una cita incómoda, ya que Sudáfrica había sido elegida para ser sede del campeonato mundial de rugby 1995. El rugby era el símbolo del deporte blanco. Y, una vez más, Mandela demostró que no hay nada incómodo para él. Llamó entonces al capitán de los Springboks, la selección nacional que tenía un solo jugador negro entre 25. François Pienaar fue un aliado importante para el presidente en ese torneo. Los jugadores blancos cantaron el nuevo himno, lucieron en la camiseta la nueva bandera nacional y, además, se quedaron con la copa de oro. Por supuesto, Mandela, con sus 77 años, 27 de los cuales los pasó en las cárceles del odio racial, fue el hincha número uno, aplaudió los tries sudafricanos y dio un paso más para avanzar en la búsqueda de ese Estado multirracial por el que había dispuesto jugarse la vida en 1960. Un detalle, menor, pero ilustrativo: a mediados de enero se jugó en Mar del Plata un torneo de rugby con equipos de siete jugadores en vez de 15 (seven) y lo ganó el seleccionado sudafricano, que tenía una abrumadora mayoría de jugadores negros.

Fuente:http://www.prodiario.com.ar/despachos.asp?cod_des=64970&ID_Seccion=17

Cómo la generación posterior a la II Guerra dirige los mercados..

Las dos décadas pasadas han visto la producción de una enorme burbuja

John Authers

¿De dónde vienen las burbujas de inversión, y qué podemos hacer al respecto?
Las dos décadas pasadas han visto la producción de una enorme burbuja. Una real burbuja de inversión usada para venir una vez cada generación o dos. Pero los pasados diez años han visto dos crisis épicas. Mientras la primera, que explotó hace casi exactamente una década, tenía un claro epicentro en las acciones de Internet, la segunda involucró activos dispares en todo el mundo, de todas las monedas de los mercados emergentes a través de materias primas hasta precios inmobiliarios y, por supuesto, el crédito estructurado.

También ha habido una burbuja en el uso de la palabra “burbuja”. Financial Times la usó más de un 66% más a menudo durante el año pasado que en el 2006. Dada la reciente experiencia, la gente está comprensiblemente inclinada a ver burbujas por todos lados.

El último episodio del Estudio de Bonos de Barclays, publicado la semana pasada, da cierto contexto. Este suministra rigurosas comparaciones de retornos de inversión a largo plazo.

Este año, Barclays eligió estudiar cómo las burbujas de los pasados 10 años se desarrollaron. Los factores económicos no ayudan mucho. El punto general de una burbuja es que los precios de los activos están separados de los fundamentos económicos.

Más bien, Tim Bond de Barclays indica que estas burbujas fueron guiadas por cambios en la demanda por acciones y otros activos, y estos, en cambio, fueron guiados por lo demográfico.

Él señala que las acciones sólo comenzaron a volverse vehículos de ahorros masivos del mercado en los años 50, cuando las compañías de gestión de inversión comenzaron a mercadear sus servicios.

Este proceso se aceleró fuertemente a principios de los 80, mientras la generación posterior a la Segunda Guerra Mundial comenzó a entrar a la edad de productividad pico y a ahorrar, y según la introducción de los llamados planes de pensiones en Estados Unidos dio a los individuos un mayor incentivo para comenzar a jugar en los mercados de acciones.

Como en 1980, el mundo ha sobrevivido sin una burbuja real desde la Gran Crisis de 1929. La única excepción fue el oro, lo cual afectó niveles absurdos a inicios de ese año cuando el segundo aumento del precio del petróleo suscitó temores de persistente inflación.

Desde ese punto, la economía mundial disfrutó de la “Gran Moderación”, un periodo en que el crecimiento económico era inusualmente estable, y cuando la inflación pareció ser golpeada, seguida por una mayor volatilidad en los precios de los activos y las burbujas de la década pasada.

Bond indica, de forma extremadamente convincente, que esto puede principalmente ser atribuido a las demografías.

A medida que envejece la generación post segunda guerra mundial, y el gran mercado bajista los hizo más confiados, así ellos sobre invirtieron en activos alrededor del mundo.

El proceso estaba ya aparentemente creciendo cuando Alan Greenspan pronunció su famoso discurso acerca de los riesgos de la exhuberancia irracional a finales de 1996, y fue obvio con la crisis de Asia del año siguiente, y luego la gran burbuja de Internet que finalmente explotó en el año 2000.

Como lo pone Bond, el tamaño de la cantidad de capital disponible para verter en los mercados de acciones asiáticos, o en las acciones de Internet, fue desproporcionado para la disponibilidad de oportunidades de inversión.

No estaba en los intereses de nadie decir esto a la generación post Segunda Guerra Mundial, debido a que la industria de inversión era pagada de acuerdo a la cantidad de activos que manejaba.

Visto a largo plazo, Barclays comparó las proporciones cíclicas precio/ganancias sobre las acciones desde 1950 con la proporción de 35 a 54 años de edad en la población. Según muestra la gráfica, el ajuste es excelente. Las valoraciones de acciones se volvieron más extensas justo cuando la cohorte de esa generación estaba ahorrando y produciendo más.

¿Cómo cambió esto en la crisis crediticia posterior? Los errores que se cometieron tanto en la política monetaria de Estados Unidos como en la regulación de los préstamos hipotecarios de Estados Unidos, fueron serios factores colaboradores. Pero nuevamente, los factores demográficos son una potente fuerza subyacente. Enfrentados con la crisis en las acciones, y con sus inminentes retiros, dicha generación sólo se esperaba que pusiera dinero en bonos y otros productos de deuda, y de ese modo ayudar a presionar las tasas de interés hacia arriba. Eso es exactamente lo que ellos hicieron.

Esto condujo a un aumento en el apetito global para colocar ahorros en instrumentos de deuda, lo cual, como señala Bond es lo mismo que un aumento en el apetito global para prestar.

Las implicaciones para el futuro son incómodas. La proporción de 35 a 54 años de edad en la población se mantendrá disminuyendo por otra década, mientras el inminente crecimiento en la retirada población podría ser muy fuerte.

Eso implica que las valoraciones de acciones pueden mantenerse bajando. El cambio demográfico que guió a un mercado bajista de acciones por dos décadas puede esperarse que guíe a un mercado alcista por otras dos décadas. Eso implica que este mercado alcista tiene otra década por delante.

En contra de esto, las valoraciones de acciones ya se han calmado bastante. Si las compañías se mantienen produciendo un decente crecimiento de ingresos, las acciones pueden todavía rendir.

Y esto puede hacer los mercados más eficientes. Con la cantidad de capital disponible en contracción, al menos seremos menos susceptibles a burbujas de inversión.

Las claves

1. Burbujas

Las dos décadas pasadas han visto la producción de una enorme burbuja. Una real burbuja de inversión usada para venir una vez cada generación o dos, la segunda involucró activos dispares en todo el mundo, de todas las monedas de los mercados emergentes

2. Mal empleo de la palabra

También ha habido una burbuja en el uso de la palabra “burbuja”. Financial Times la usó más de un 66% más a menudo durante el año pasado que en el 2006. Dada la reciente experiencia, la gente está comprensiblemente inclinada a ver burbujas por todos lados.

3. Cambios en demanda

Más bien, Tim Bond de Barclays indica que estas burbujas fueron guiadas por cambios en la demanda por acciones y otros activos, y estos, en cambio, fueron guiados por lo demográfico.

4. Guiado por un nuevo cambio

El cambio demográfico que guió a un mercado bajista de acciones por dos décadas puede esperarse que guíe a un mercado alcista por otras dos décadas. Eso implica que este mercado alcista tiene otra década por delante.

VERSIÓN AL ESPAÑOL DE ROSANNA CAPELLA

Monday, February 15, 2010

MANUAL PARA DESTRUIR UN PAÍS..

Versión en francés: http://luisbrittogarcia-fr.blogspot.com
Bibliografía del autor: http://luis-britto.blogspot.com

1.Cuando navegando sin saber dónde vas encuentres tierra, afirma que la has descubierto y extermina todos los pobladores.

2.Si exterminados los pobladores no encuentras quien te trabaje gratis, secuestra centenares de miles de africanos y conviértelos en esclavos, hasta tener una proporción de más de ocho esclavos por cada colono.

3.Para amansarlos dáles con el látigo por las espaldas y por la cabeza con una religión que los fuerce a adorar a sus explotadores.

4.Viola a las esclavas y encomienda a los mulatos que nazcan las más espantosas tareas de represión contra sus hermanos.

5.A fin de evidenciarles la superioridad moral de sus amos, entrega el país en 1697 a los filibusteros de La Tortuga al mando del pirata Du Casse.

6.Incrementa la explotación hasta que Haití en 1791 produzca 89.000 toneladas de azúcar, más que Barbados, Jamaica y Cuba juntas, asegurando al mismo tiempo que para los productores la vida más amarga del mundo.

7.Proclama en la metrópoli francesa en 1789 la Libertad, la Fraternidad y la Igualdad, pero cuando lo esclavos se subleven reclamándolas en 1791, envía en 1801 una expedición de 40.000 veteranos para impedir que los haitianos sean tratados como hombres y como ciudadanos.

8.Acepta en 1816 la generosa ayuda de Haití para llevar adelante la Independencia de América Latina, pero olvida invitarla al Congreso Anfictiónico de Panamá en 1826.

9.Después de que los esclavos sublevados derroten a los 40.000 invasores en 1804, espera hasta 1826 para reconocer su Independencia, a cambio de una indemnización de 150 millones de francos oro a ser pagados, no a los esclavos, sino a sus antiguos amos.

10.Espera a que esa deuda demoledora destruya lo que no devastó la guerra de liberación, y propicia en 1915 una invasión por Estados Unidos que ocupe el país hasta 1934.

11.Durante esa ocupación militar avanza las privatizaciones: Naturaleza privatizada (en 1925 estaba destruido 60% de los bosques, hoy el 98%), sociedad privatizada (80% de pobreza) educación privatizada (52% de analfabetismo) sanidad privatizada (mortalidad infantil de 110 niños muertos por cada mil nacidos vivos) tierra privatizada (el 70% de los campesinos no la posee) seguridad social privatizada (abolidas las pensiones de vejez y el derecho de huelga) privatizados los salarios (dólar y medio diario) beneficios privatizados (los inversionistas extraen 500 % de ganancias) comercio privatizado (el 70% de las exportaciones son para Estados Unidos) privatizadas las islas (fueron entregadas Cayemite y La Tortuga) privatizados los derechos humanos (30.000 opositores desaparecidos en l5 años) sangre privatizada (la compran a 3 dólares el litro y la revenden a 25).

12. Al retirar las tropas, deja el país ocupado por dinastías de dictadores brutales que asesinen a todo el que luche por la mejora del nivel de vida, las reformas sociales o la democracia.

13. Si algún candidato gana elecciones democráticas, apoya un golpe de Estado que lo derribe, lo secuestre y lo exilie.

14. Tras el golpe, privatiza la Minoterie d´ Haití y Ciment d´ Haití, las empresas de harina de trigo y de cemento, y véndeselas a una empresa de Kissinger, para que en caso de emergencia los haitianos no tengan pan ni cemento para reconstruir su país.

15. Si el dictador que exilia al demócrata es depuesto por el pueblo, invade de nuevo Haití con dieciocho buques de guerra, dos portaaviones nucleares, decenas de helicópteros Blackhawk, vehículos blindados y seis mil soldados gritando: "No estamos en guerra; vinimos a restaurar la democracia y suministrar ayuda humanitaria".

16. Restaurado el dictador, deja el país de nuevo ocupado con fuerzas militares de la ONU.

17. Si a pesar de todo un presidente elegido democráticamente y depuesto vuelve del exilio y gana de nuevo las elecciones en 2001, impide la llegada de toda ayuda externa, impón un bloqueo, apoya otro golpe de Estado, secuestra al demócrata y exílialo a Suráfrica.

18. Oculta denuncias como de la Marguerite Laurent, de la Red del Liderazgo Haitiano de Juristas y defensora de Jean Bertrand-Aristide, quien sostiene que "Está probado que Estados Unidos encontró petróleo en Haití hace decenios y debido a las circunstancias geopolíticas de aquella época tomó la decisión de mantener en reserva el petróleo haitiano para cuando se agotara el de Oriente Próximo. Esto está detallado por el Dr. Georges Michel en un artículo fechado el 27 de marzo de 2004, en el que resume la historia de las exploraciones y reservas petrolíferas de Haití, y en las investigaciones del Dr. Ginette y de Daniel Mathurin. También hay evidencias de que esas mismas grandes compañías petroleras estadounidenses y sus interrelacionados monopolios de ingeniería y subcontratistas de defensa hicieron planes, hace decenios, para las aguas de los fondeaderos de Haití, ya fuera para refinerías de petróleo o para desarrollar lugares de almacenamiento o depósitos donde el crudo pudiera ser almacenado y después transbordado a pequeños buques petroleros para suministrar a EE.UU. y a los puertos del Caribe. Esto está detallado en un documento sobre la Dunn Plantation en Fort Liberte de Haití” "(Cintia McKinney: Global Research).

19. Utiliza sin declaratoria de guerra contra el país víctima todo el repertorio de armas sicológicas, químicas, bacteriológicas, virales, climáticas y tectónicas que puedan producir los laboratorios del mal.

20. Cuando el desastre natural se abata sobre un pueblo que ha soportado tantas catástrofes políticas y sociales, ocupa sus aeropuertos y puntos estratégicos con unidades de la IV Flota, de la 82 División Aerotransportada, 20.000 marines armados y 3.500 soldados más de la ONU, para impedir la llegada de socorros, acabar a balazos con aquellos a quienes el sismo no haya exterminado y convertir el país en base militar.

Vuelto así el país inmolado a la esclavitud, no olvides que este Manual es talla única y se aplica a todos los países del mundo, con la única diferencia del turno.

Colaboración de YESL.-

Monday, February 8, 2010

Atacar el contraataque...

Escrito por: Narciso Isa Conde

El contraataque se inició con el golpe en Honduras, continuó con la siete bases militares en Colombia y el apoyo de Obama al agresivo régimen narco-para-terrorista de Uribe, tomó nuevos bríos con el triunfo de la extrema derecha chilena y con la “legalización” de la continuidad golpista en Honduras a través del “triunfo electoral” de Porfirio Lobo.

A esto hay que agregarle el plan de reinstalación de las bases en Panamá, los trajines golpistas en Paraguay, la ampliación de la ocupación militar de Haití y los avances de la derecha conservadora en Argentina.

El uso de la tragedia del terremoto para incrementar la soldadesca gringa en Haití ha servido para reforzar la retaguardia militar estratégica de EEUU en el Caribe, en la proximidad de Cuba y tocando territorio dominicano.

Ciertamente -como afirma el comandante Chávez- Colombia, Honduras y Haití representan “un triangulo fatal” que procura fortalecer la contraofensiva política de un imperialismo decadente y pentagonizado.

Por suerte, en el corazón de esta oleada de cambios están nuestros pueblos, que se resisten a seguir viviendo como se lo impone el dominio de una clase dominante-gobernante corrompida, corruptora y deshumanizada al extremo y de un imperialismo implacable.

El contraataque precisa ser atacado con el impulso a la oleada redentora y a ese propósito convendría volcar toda la solidaridad unificada y convergente posible hacia esos “puntos calientes” y esos “eslabones en crisis”, contra esos “engendros” político-miltares que conforman la referida “triangulación fatal”.

Esto puede lograrse emprendiendo una fuerte campaña de respaldo y en favor del reconocimiento internacional de la Resistencia Hondureña como “fuerza beligerante”. Igual se precisa en el caso colombiano respecto a la insurgencia armada y a la oposición civil alternativa, así como impulsar la movilización para que Haití sea desocupada militarmente y auxiliada sobre todo con médicos, constructores, inversiones productivas, asesores, recursos, alimentos, medicinas y políticas en favor de la autodeterminación y la autoorganización de su pueblo.

Convendría, al mismo tiempo, desplegar esfuerzos para la unificación de las fuerzas sociales y políticas transformadoras en todo el continente hasta conformar un gran movimiento que articule la diversidad revolucionaria latino-caribeña, presta a atacar y a derrotar los contraataques.

Europa no recibe...

Escrito por: Koldo

Qué triste mueca la de esa Europa sin memoria, hoy empeñada en desandar su historia, en negarse hasta la náusea en aquella virtud en la que, si aún fuera generosa, debería asentar su razón y su respeto, cuando los horizontes se echaban a la espalda y la punta de la bota era el camino!

¡Que amargo y vano olvido el de esa Europa que, así fuera el hambre que empujara la mano o la ambición que sostuviera el puño, rompió amarras y puso rumbo al sur, siguió el curso del sol hasta encontrarse de nuevo con la noche, llamó a la noche día mientras fundaba el este y el oeste, y ya hastiada de andar, señora a veces, casi siempre golfa, ha terminado anclando sus espantos en el mismo corazón de su virtud! ¡Qué sórdida palabra que no dice, que abrazo que no une, que beso que no besa!

Temprano hubo ingleses surcando las aguas del Caribe, en un trasiego armado de alborotos, acarreando esclavos y devengando haciendas, desde el lago Ontario hasta la Patagonia, a lomos de elefantes en la India, de la mano del opio en el mar de la China, en los llanos de Australia, en el Africa austral, en la vecina Irlanda.

Eran franceses los que entraron en Quebec, se asomaron a Martinica, durmieron en Haití y despertaron en Guyana, los que hablaron francés en Mauritania y fumaron hachís en Marrakech, los mismos que entraron en Argel, en Chad, en Senegal, que volvieron a amar en Indochina y a quienes todavía recuerdan en Vietnam y siguen empeñados en registrar franceses cuando miran a un corso, a un vasco o a un bretón.

Y fueron españoles los que hicieron Primada a La Española, ascendieron al Cuzco, bajaron a Santiago, nominaron Caracas, La Habana, Buenos Aires, recorrieron Centroamérica y Colombia cuando América valía un Potosí, y atravesaron las dunas del Sahara o cantaron nostalgias filipinas y se buscan sin verse en los imposibles Pirineos.

Y también portugueses deambulando el negro meridiano, a vueltas por Angola, de Madagascar a Mozambique, de Mindanao a Singapur, de Sao Paulo al Amazonas. Y holandeses, belgas, italianos, alemanes...europeos.

Pero esa Europa que nunca supo de puntos y de comas, que ha marcado su acento en todos los idiomas, la pertinaz viajera, la que avistó los polos y coronó las cumbres y anda a vueltas, también, por el espacio… esa Europa, hoy no recibe, hoy no quiere inmigrantes, hoy no quiere que nadie la perturbe y por ello reitera la vieja cantaleta: más muros, más candados, más rejas.

Ideas instantáneas...

De Homero Figueroa

Las crisis son los titubeos de los tiempos. La verdad se esfuma y deja el espacio a las opiniones. Las opiniones son cambiantes como los días. Los hombres las usan y tiran. Los contemporáneos no sabemos a qué atenernos sobre nada bajo este confuso cielo del siglo veintiuno. El hecho de que todo sirva hace que nada sirva. Es una generación de perezosos mentales, con prisa para actuar y poco tiempo para pensar. La locura del reloj hizo surgir la nueva industria de lo instantáneo. La práctica llegó al mundo de las ideas, las queremos listas para consumir, sin esfuerzo.

hfigueroa@diariolibre.com

Sunday, February 7, 2010

¿Cómo vivir en Italia y no tropezar con Berlusconi?


Atribuido por algunos al escritor Stefano Benni, esta realista historieta ha girado y se ha reproducido en la red, con mínimas variaciones y sin título preciso, hasta convertirse en simple, contundente, objetivo "saber popular". Traducido para Rebelión por Gorka Larrabeiti

Hola, me llamo A., vivo en Milano 2, en un edificio construido por el Presidente del Gobierno.

Trabajo en Milán, en una empresa cuyo principal accionista es el Presidente del Gobierno.

También el seguro del coche con el cual me dirijo al trabajo es del Presidente del Gobierno.

Me paro todas las mañanas a comprar el periódico, cuyo propietario es el Presidente del Gobierno.

Por la tarde, salgo del trabajo y voy a hacer la compra en un supermercado del Presidente del Gobierno, donde compro productos realizados por empresas del Presidente del Gobierno.

Por la noche, casi siempre veo las televisiones del Presidente del Gobierno, donde las películas (producidas a menudo por el Presidente del Gobierno) se interrumpen continuamente con anuncios realizados por la agencia publicitaria del Presidente del Gobierno.

Entonces, me harto y voy a navegar un poco en Internet usando el servidor del Presidente del Gobierno.

Sobre todo, veo los resultados de los partidos, porque soy del equipo del Presidente del Gobierno.

Una vez a la semana más o menos voy a un cine de la cadena del Presidente del Gobierno, donde también veo una película producida por el Presidente del Gobierno, además de los anuncios iniciales también realizados por la agencia del Presidente del Gobierno.

Los domingos me quedo en casa, leyendo un libro, cuya casa editorial es propiedad del Presidente del Gobierno.

Naturalmente, justamente, como en todos los países democráticos también en Italia es el Presidente del Gobierno quien hace las leyes, luego aprobadas en un parlamento, cuya mayoría está en manos del Presidente del Gobierno.

Quien, obviamente, gobierna en interés exclusivamente MÍO.

¿Existe Haití?

Brasil de Fato

Traducido para Rebelión por Susana Merino

El terremoto que destruyó Haití nos mueve a preguntarnos ¿existe Haití? Hoy sí, pero ¿antes de ser destruido por el terremoto? ¿A quién le importaba la miseria de aquel país?


A principios del siglo XIX, dos franceses, los hermanos Edouard y Jules Verreaux, interesados en exhibir en Europa una colección de animales exóticos, viajaron a África del Sur. La fotografía no había sido aún inventada y la única posibilidad de saciar la curiosidad del público era además de a través del dibujo y la pintura, la taxidermia, es decir embalsamar animales muertos o llevarlos vivos a los zoológicos.

En el museo de la familia Verreaux se podían ver jirafas, elefantes, monos, rinocerontes. Pero tampoco podía faltar un negro. Los hermanos le aplicaron la taxidermia y lo expusieron de pie en una vitrina de París, con una lanza en una mano y un escudo en la otra. Al cerrar el museo los hemanos Verreaux vendieron la colección a Francesc Darder, veterinario catalán, primer director del zoológico de Barcelona, quién compró la colección, incluido el africano. En 1916 abrió su propio museo en Banyoles, España.

En 1991 el médico haitiano Alphonse Arcelin visitó el Museo Darder. El negro reconoció al otro negro. Por primera vez aquel muerto fue sujeto de compasión. Indignado Arcelin lo difundió al mundo, en vísperas de la apertura de los juegos olímpicos de Barcelona y convocó a los países africanos a sabotear el evento. El mismo Comité Olímpico intervino para que el cadáver fuera retirado del museo.

Finalizadas las Olimpiadas, la población de Banyoles volvió a ocuparse del tema. Muchos insistían en el sentido de que la ciudad no debería echar mano de la tradicional pieza de su patrimonio cultural. Arcelin movilizó a los gobiernos de los países africanos, a la Organización para la Unidad africana y hasta a Kofi Annan, en ese momento secretario general de las Naciones Unidas. Viéndose atrapado, el gobierno de Aznar decidió devolver el muerto a su país de origen. El negro fue descatalogado como pieza de museo y reconocida su condición humana, mereciendo un digno entierro en Bostwana.

En mis tiempos en los años 60, la revista “Realidad”, escandalizó a Brasil con un reportaje de tapa que tenía como título ”El Piauí existe” Fue una forma de llamar la atención de los brasileños sobre el estado más pobre del Brasil, ignorado por el poder y la opinión publica.

El terremoto que destruyó a Haití nos impulsa a preguntar ¿Existe Haití? Hoy sí. Pero antes de haber sido asolado por el terremoto, ¿a quién le importaba la miseria de aquel país? ¿Quién se preguntaba por qué Brasil envió allí tropas a pedido de la ONU? ¿Y ahora será que esa catástrofe –la más terrible que he conocido en mi vida– es solo culpa de los desastres naturales? ¿O de Dios que se mantiene en silencio frente al drama de millares de muertos, heridos y desamparados?

Colonizado por los españoles y los franceses, Haití declaró su independencia en 1804 lo que le valió un duro castigo: los esclavistas europeos y usamericanos le impusieron un bloqueo comercial durante 60 años.

En la segunda mitad del siglo XIX e inicios del XX Haití tuvo 20 gobiernos, 16 de los cuales fueron depuestos o asesinados.

Entre 1915 y 1934, los EEUU ocuparon Haití. En 1957, el médico François Duvalier, conocido como Papa Doc, elegido presidente instaló una cruel dictadura apoyado por una milicia de Tontons macoutes y por los EEUU. A partir de 1964 se proclamó presidente vitalicio… Al morir en 1971 lo sucedió su hijo Jean Claude, o Baby Doc, que gobernó hasta 1986 cuando se refugió en Francia.

Haití fue invadido por Francia en 1869, por España en 1871, por Inglaterra en 1877, por los EEUU en 1914 y en 1915 hasta 1934. Nuevamente por los EEUU en 1969.

En 1990 hubo elecciones democráticas en las que fue elegido el Padre Jean-Bertrand Aristide, cuyo gobierno fue decepcionante. Depuesto en 1991 por los militares se refugió en los EEUU y volvió al poder en 1994. En 2004 fue acusado de corrupción y en connivencia con Washington emigró a Sudáfrica. Actualmente presidido por René Preval Haití se hallaba intervenido por tropas de la ONU y de hecho por tropas de los EEUU luego del terremoto.

Para el occidente “civilizado y cristiano” Haití fue siempre un negro inerte en una vitrina, embalsamado en su propia miseria Por eso los medias de los blancos exhiben por primera vez los cuerpos destrozados por el terremoto. Nadie por TV ni en fotos vio algo semejante cuando Nueva Orleans fue destruida por el huracán o en el Iraq alcanzado por las bombas. Ni tampoco luego del tsunami en Indonesia.

Ahora Haití pesa en nuestra conciencia, hiere nuestra sensibilidad, nos arranca lágrimas de compasión, desafía nuestra impotencia. Porque sabemos que está destruido no solo por causa del terremoto sino especialmente por lo escaso de nuestra solidaridad.

Otros países sufren movimientos sísmicos y no por eso la destrucción y las víctimas son tantas A Haiti le enviamos “misiones de paz” tropas de intervención, ayudas humanitarias, nunca proyectos de desarrollo sustentable.

Terminadas las acciones de emergencia, ¿quién reconocerá a Haití como nación soberana independiente con derecho a la autodeterminación? ¿Quién seguirá el ejemplo de la doctora Zilda Arns (1) de enseñar al pueblo a ser sujeto multiplicador y emancipador de su propia historia?

(1) N. de T. Pediatra y sanitaria brasileña de destacada actuación en Haití como fundadora y coordinadora internacional de la Pastoral de los Niños y de los Ancianos fallecida en el sismo del 12 de enero de 2010.

Fuente:http://www.brasildefato.com.br/v01/agencia/analise/o-haiti-existe

Friday, February 5, 2010

Facebook retrasa la evolución de la web...

El caparazón

El viernes era el tercer Data Privacy Day internacional, con Google, Microsoft o Walmart como participantes. Facebook, obviamente, después de la polémica generada en cuestión de políticas de privacidad de su plataforma, no estaba.

No es de extrañar si leémos el objetivo del evento: “Se trata de una celebración internacional de la dignidad de los individuos expresada a través de la información personal”

Agregación de datos y recomendaciones personales son clave en la evolución hacia una web más personalizada
que siempre describimos, asi como para los distintos acercamientos publicitarios de compañías como las que mencionábamos. El tema es clave, de hecho, porque afecta a la definición de los distintos contextos o variables en torno a las cuales la web puede personalizarse. Tenéis en el slide, extraído de una presentación reciente (Entornos de información, Content Curators en organizaciones) una hipótesis sobre los más importantes hoy.

Así, me uno a lo que comenta Kirkpatrick: lo que podría haber facilitado Facebook, con su ya tradicional falta de respeto a sus usuarios en torno a este tema y el toque final de los cambios en Diciembre de 2009, es el miedo a compartir datos, perder la privacidad, generando una falta de confianza de los usuarios en los social media que ralentiza la evolución general de la web.

“Si pensáramos FB de nuevo, todo sería público”, decía Zuckerberg recientemente.

Y publicábamos que estaba bien, que es fantástico lo de la Sociedad de la transparencia, pero no que sea Zuckerberg quien, en interés propio, pretenda ahora (y no antes) que la sociedad ha evolucionado, cuando podríamos decir que desde sus inicios y sobretodo con sus últimas actuaciones, lo que ha forzado es el miedo a compartir.

Es antiguo ya el manifiesto de Derechos de los usuarios de la web social, que defiende la portabilidad, la libertad de llevar nuestros datos de una a otra red social, que FB no respetaba con la excusa de la privacidad.

Hace solo dos años que el mismo Zuckerberg situaba la privacidad, el control de los propios datos como elemento esencial en la plataforma. Así lo creyeron 350 millones de usuarios hoy decepcionados, desde que en Diciembre y de forma retroactiva vieron cómo sus aficiones, algunas fotos y su grafo social (el conjunto de relaciones, de conexiones, de listas de amigos a las que se pertenece), pasaban a formar parte de la ancha web, pudiendo ser indexados por Google por defecto.

El tema ha generado muchas quejas, e incluso el gobierno canadiense investigando la cuestión. Porque lo que de verdad debería preocuparnos no es tanto la apertura de datos (veíamos hace poco los esfuerzos de Berners Lee y distintos gobiernos por la reutilización de los datos públicos), sino las condiciones y sobretodo la finalidad de la misma.

Y es que en el caso de Facebook, la apertura en Diciembre no pretende precisamente facilitar el Análisis de datos agregados para generar interesantes estudios o una web más personalizada, sino poder vender los grafos sociales para estudios de mercado o estrategias publicitarias de lo más diverso.

Dicho en otras palabras, es posible que muchos de nosotros estuviésemos dispuestos a compartir datos en beneficio de diversas investigaciones sociológicas o incluso de mercado, para poder recibir una publicidad más ajustada a nuestros intereses, pero siguiendo las normas más evidentes y básicas de reciprocidad, creo que a cambio deberíamos poder recuperar su control, su interoperabilidad con estándares y otras plataformas, la capacidad de decidir qué empresa los gestiona, a qué poder benefician.

http://www.dreig.eu/caparazon/2010/01/30/fb-transparencia-evolucion/?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+caparazon+(caparazon)

Obama, Premio Nobel de la Paz, impulsa el gasto militar más alto de la historia de los EEUU

EEUU
Tercera Información

El gasto militar anual presentado por Barack Obama es el mayor de la historia de los EEUU, 708.000 millones de dólares, de los cuales casi 160.000 serán exclusivamente para mantener la ocupación en Irak, Afganistán y Pakistán. Este anuncio ha suscitado varias críticas debido al aumento en tiempos de crisis, lo que supondrá recortes en otros programas federales de atención social.

Barack Obama, el último ganador del Premio Nobel de la Paz, ha aumentado el número de tropas estadounidenses en los países ocupados y ha afirmado que lo que acontece allí son "guerras justas".

El Departamento de Defensa de los Estados Unidos de América ha publicado su informe cuatrimestral simultáneamente con el anuncio de este aumento y en él señala a China y a India como nuevas amenazas supranacionales.

El informe de defensa, que se ha presentado en el congreso, señala que las bases militares y las tropas que están en América Latina se mantendrán y se limitarán, palabras desmentidas por el amplio despliegue militar en Haití que continuará en la isla antillana a largo plazo, según declaró la Secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton.

BiblioFyL: no pedir permiso para leer...

Derecho a LEER

Somos un grupo de estudiantes universitarios de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, que asisten a la universidad pública y gratuita. Si bien no debemos abonar ningún arancel por asistir a la misma, mientras cursamos nuestras carreras nos encontramos con obstáculos económicos relacionados a la gratuidad de la universidad; en este caso, las dificultades para conseguir los materiales de estudio, ya sea por costos inaccesibles, por haber quedado fuera de circulación de mercado o por ser editados en el extranjero y no ser importados a la Argentina.

El acceso a los materiales de estudio es, para nosotros, una necesidad. Una necesidad que nace a partir del ejercicio de un derecho básico: el derecho a la educación. En vistas de que esta necesidad no es satisfecha ni por el Estado ni por la facultad, a principios del año 2007 comenzamos a organizarnos alrededor de un objetivo muy sencillo: conseguir los materiales de estudio. Inicialmente lo hicimos en la subsección “Archivos” de un foro en Internet, pero a medida que fuimos compartiendo y aumentando la cantidad de material, se hizo necesario centralizar el modo de organización de acceso y distribución de la información. Así armamos la biblioteca virtual “BiblioFyL”, que reunía 7.800 textos obligatorios de las 9 carreras que se estudian en nuestra facultad, y proyectaba para el año 2009 superar los 10.000 textos. La BiblioFyL recibía 6.000 visitas diarias como mínimo, y los textos tenían un promedio de 100 descargas cada uno.

Si bien existen muchas bibliotecas virtuales, la nuestra se caracterizaba por:

a) organización colaborativa: los mismos estudiantes se organizaban para escanear los textos, subirlos y categorizarlos;

b) autonomía: no dependíamos de ninguna organización institucional y/o gubernamental;

c) libre acceso a la información: no se utilizaban contraseñas y tanto la interfaz como el modo de participación para subir material estaban diseñados sin grandes complejidades técnicas, en función de facilitar el acceso.

La biblioteca, una simple colección de links, debió ser dada de baja el 25 de septiembre de 2009, a raíz de una intimación legal que llegó al host donde estaba alojada, por violar las leyes 11.723 de Propiedad Intelectual y 25.446 de Fomento del Libro y la Lectura.

A partir de que nos obligaron a dar de baja el sitio, comenzamos a reunirnos y comprender que, si bien habíamos logrado dar una respuesta a nuestra necesidad, ésta chocaba con otros derechos. Luego de diversas reelaboraciones, llegamos a la conclusión de que hay primacía de unos derechos por sobre otros. Consideramos que acceder a la educación, a la información, el conocimiento y la cultura, son derechos que están por encima del derecho de autor que establece la 11.723. Defendemos un derecho antes que violar una ley.

En Argentina, la ley 11.723 y la 25.446 criminalizan, entre otros, a estudiantes, docentes e investigadores, dado que restringe su acceso a los materiales necesarios para desarrollar sus actividades. La posibilidad de los autores de explotar comercialmente sus obras y ser reconocidos por ellas, no debería impedir el libre acceso a la información y al conocimiento.

Los autores cobran sólo un 12% del precio de tapa del libro, mientras que el porcentaje restante se reparte entre editores y distribuidores. En los modelos actuales de reproducción, distribución y comercialización, el derecho de autor y la propiedad intelectual benefician a grupos económicos muy específicos; en primer lugar, las grandes editoriales, y en segundo lugar, a las sociedades de gestión colectiva de derechos como el CADRA (Centro de Administración de Derechos Reprográficos de Argentina) y la CAL (Cámara Argentina del Libro).

El carácter prohibitivo y restrictivo del modelo actual afecta a dos partes: a los autores que desean ser publicados pero que no cumplen con las “necesidades de mercado” y a los lectores que se ven imposibilitados a encontrarse con sus autores. Las nuevas tecnologías de la información, de las que nosotros hacemos uso porque entendemos que nos devuelven la libertad respecto de la decisión de los modos y opciones de lectura, apuntan a cuestionar el monopolio sobre qué y cómo se lee actualmente. En este marco es necesario comprender que si una biblioteca digital brinda la posibilidad de expansión infinita (repetimos, 6.000 visitas diarias, 7.800 textos multiplicados por 100 descargas cada uno), a lo que deberíamos orientarnos es a favorecer el encuentro entre autor y lector.

La explotación privada de las ideas por parte de editores usureros y gestoras colectivas de derecho destruyen a los autores, a los lectores y a los libros, no los defienden. ¿De qué “fomento del libro y la lectura” se habla, cuando en supuesta defensa de una ley se produce un acto de bibliocastia? Forzar la baja de bibliotecas digitales no se diferencia en lo absoluto de incendiar bibliotecas físicas. El soporte material de los textos no cambia las operaciones que se realizan sobre ellos: lo que sucedió con BiblioFyL es un acto de coerción y censura sobre la información y quienes la distribuyen. Ciertos editores y gestoras colectivas de derechos no son otra cosa más que inquisidores disfrazados de fomentadores de la cultura y la educación. Su interés lucrativo nada tiene que ver con el conocimiento.

BiblioFyL tiene dos caras que nos parece importante reconocer. Por un lado, las características que ya mencionábamos que la diferenciaban entre el resto de las bibliotecas digitales; por el otro, el fenómeno cultural, educativo y político que constituía desde su misma existencia. La BiblioFyL es un hito en la medida en que interpela a una necesidad no satisfecha y la resuelve desde la colaboración entre pares; pero, al mismo tiempo, cuestiona la propiedad sobre los canales de distribución de las ideas y los modos de acceso y circulación del conocimiento en la universidad pública y gratuita.

En el contexto de un mundo hipertecnologizado sólo para las capas medias y superiores, hablar del acceso al conocimiento supone tratar también con las diferencias tanto cuantitativas como cualitativas a ese acceso. No se nos escapa que la universidad pública es un lugar al que sólo acceden quienes pueden hacerlo de acuerdo con sus niveles educativos y económicos; simplemente estábamos poniendo en cuestión que este acceso se limite todavía más. BiblioFyL apuntaba a la politización de la técnica y al uso de heramientas técnicas como instrumentos de una política de lucha en defensa de la educación y el acceso.

No queremos licencias para leer ni tenemos que pedir permiso para hacerlo: es nuestro derecho más básico e inalienable. La confusión, nada inocente, de que se destruyen libros y autores con la distribución gratuita de los mismos, forma parte de la estrategia comunicativa de grupos económicos que no han sabido prever ni adaptarse a las nuevas tecnologías de la información. Mediante un refuerzo en las leyes, estos grupos buscan reprivatizar el espacio de lo público y los procesos de construcción de sentido que, cada vez más, tienden a ser liberados por diversos actores que se posicionan a favor de un modo diferente de construir cultura y conocimiento.

En este marco, la ley que cae sobre nosotros, nos afecta a todos. Organismos usureros y parasitarios, mediante leyes de patentes, propiedad intelectual y derechos de autor, controlan hoy por hoy lo que hace o deja de hacerse con libros, semillas, material fitogenético, medicamentos y cualquier otro bien común intangible que sea potencialmente privatizable. Es así como los campesinos se ven privados de sembrar sus propias semillas en economías de subsistencia; es así como los estudiantes no pueden acceder a sus materiales de estudio; es así como las personas que están enfermas deben pagar altos costes por sus medicamentos; es así como los investigadores no pueden realizar sus tareas por las restricciones al acceso de material. Todos nosotros estamos unidos en una misma lucha a favor de la libertad del conocimiento, de su libre distribución y del acceso irrestricto al acervo cultural compartido.

Golpes de bondad...

De Homero Figueroa

Voltaire dijo que si no existiese un Dios tendríamos que inventarlo. La afirmación, aunque no sea una muestra de piedad, es la admisión de que no puede el hombre vivir sin Dios. Los hombres, como los pueblos, tampoco pueden vivir sin el bien. El bien absoluto como la maldad absoluta no es posible. La vida es la lucha entre la miel y la hiel. Hay tiempos en que parecer prevalecer la maldad sobre la bondad. El país nuestro de cada día parece estar entrando en una época así. Es hora de que a golpes de bondad detengamos la creciente maldad.