Si yo fuera mujer renunciaría del Partido Revolucionario Dominicano, abandonaría la iglesia no importa que sea católica, cristiana o protestante, por negarme el derecho a la vida, el derecho a decidir sobre mi misma.
Si yo fuera mujer no votaría por quienes, sin preguntarme, deciden por mi, como es el caso de los legisladores que apoyen el artículo 30 de la nueva Constitución que condena el aborto en cualquier circunstancia, incluso cuando el embarazo es fruto de la violación de un padre, un hermano, un tío, un cuñado, un cura, un profesor o un delincuente de la calle.
Si yo fuera mujer no iría a misa, no me confesaría ante un cura que me considera impura por haber hecho el amor con el hombre que amo cuando ese mismo cura ha violado el celibato con niños y niñas.
Si yo fuera mujer tomaría mis propias decisiones. Me embarazaría cuando lo considere el momento, abortaría cuando lo crea necesario. Decidiría por mi misma los hijos que debo tener y cuando tenerlos.
Si yo fuera mujer gritaría “muerte al violador viva la infidelidad” que por siglos estuvo reservada a los hombres.
Si yo fuera mujer bebería hasta emborracharme, haría sexo por deporte sin involucrar sentimientos, como suelen hacerlo los hombres. (Un hombre que tiene sexo con muchas mujeres, incluso juntas, es un macho de hombre, mientras que una mujer que hace lo mismo es una prostituta).
Si yo fuera mujer repudiaría a un cardenal que me considera “una cosa”, a un político que me trate como un “voto”, a un hombre que me trate como un objeto sexual, como una maldita incubadora.
(Una amiga me envió un correo agudo, inteligente –claro, vino de una mujer- que dice: “Si para la iglesia el uso de la píldora del día después es un aborto, ¿la masturbación es homicidio prematuro o premeditado? ¿El sexo oral es canibalismo? ¿El coito interrumpido es abandono al menor? Y el uso del preservativo, será homicidio por asfixia?)
Si yo fuera mujer me preguntaría que haría un diputado o senador, -muchos de ellos sin calidad moral para legislar porque no han permitido que sus “hijos de la calle nazcan”- si una de sus hijas, su madre o su esposa resultara embarazada fruto de una violación, cual seria su posición. ¿Estarían de acuerdo con el aborto? ¿Qué harían si su esposa, su hija o su madre resultaran con un embarazo de alto riesgo?
Si yo fuera mujer renunciaría del PRD y de cualquier partido que viole mis derechos.
No hay ninguna razón para que una mujer milite en un partido que no la valore, que no defienda sus derechos, sobre todo el derecho a la vida.
Si yo fuera mujer, mujer de un diputado o senador que apoye el artículo 30 tal y como está, le pondría el divorcio al día siguiente. No dormiría a su lado jamás. No se lo daría bajo ningún concepto.
Si yo fuera mujer preferiría cerrarme antes que irme a la cama con un hombre que apoye a la iglesia, al PRD y a cualquier otra entidad que no reconozca y que no defienda mis derechos humanos, porque yo, aunque ellos no lo quieran admitir, también soy un ser humano, mi vida también tiene que ser protegida y defendida.
Y gritaría, “muerte al violador, viva la infidelidad”, ¡coño!
¡Que lástima no ser mujer!