Friday, April 30, 2010

El progreso de los tontos...

Escrito por: Pablo Mckinney (pablomckinney.com)

“No es lo mismo ver la vida si amanece/ que mirar en el crepúsculo su paso/. No ganar no es lo mismo que el fracaso". R. Amor

Uno lo pensaba hace tiempo. Lo gritó enronquecido en los pasillos y las calles en la época rojo del Doctor, pero quizás es el momento de repetirlo.

Eso de “la varilla y el cemento”, eso de anteponer la construcción a la educación en valores es el progreso de los tontos, una mentira de escenografía y decorao. Como un estudio de Hollywood pero peor.

Y es que si no definimos nuestras prioridades y perdemos la familia y sus valores, el amor, la amistad, el respeto ciudadano, ¿qué nos quedará?

De qué sirve un gran edificio, si es construido al costo de destruir la posibilidad de formar mejores familias, hijos, padres. (La educación, estúpido, la educación).

Entre 1930 y 1978, Trujillo y Balaguer construyeron el país casi entero, pero destruyeron la dignidad, la autoestima, la fe de un pueblo. Eliminaron los mejores, compraron los comprables. (De algún lado tenía que venir tanto estiércol padecido, ahora comprendo…)

Y aquí estamos. Modernos y modernizados.

Con mucho Iphone y BB, pero sin familias, sin valores, sin Dios ni fe, o sea, bien jodidos quiero decir. La mitad de la población es pobre de pan, y la otra mitad es pobre de fe, de esperanza, Dios, Pichuco, porvenir.

Somos el “pueblo blanco” de Joan Manuel Serrat, pero mulato.

Construimos de todo menos familias, albergues infantiles, infantiles estancias, guarderías, o como se diga ahora. (La familia, estúpidos, la familia.)

¿Adónde va un país que mientras se construye en varilla y cemento, se destruye en semáforos invadidos impunemente, preñado de caos; un país con más villas de lujo y marinas que guarderías infantiles, hacia dónde va?

Pobre del país donde la educación llegue a ser más secundaria que una triste meretriz envejecida.

¡Qué gris que esta la madrugada, don Radha!

¡Ya amanecerá algún día!